Potenciando el consumo en freso de ecotipo en recuperación para el sur de Chile de la Manzana Limona

Escrito por: Dra. Carolina Contreras, académica del Instituto de Producción y Sanidad Vegetal (IPSV) de la Universidad Austral de Chile; Franco Casanova, tesista de Agronomía de la UACh y Dr. Iván Maureira, Director del IPSV-UACh.

El manzano, árbol de hoja caduca, se considera originario de las zonas templadas del continente asiático. Durante el año 2018, luego de los cítricos con 152 millones de toneladas, los manzanos fueron los árboles frutales más cultivados en el mundo, incluyendo también a los perales y membrilleros con 111 millones de toneladas producidas. En nuestro país, diversos cultivares de manzana se distribuyen desde Chile central hasta la zona sur, siendo en este último lugar, donde se ha desarrollado bajo condiciones agroclimáticas, y culturales muy particulares.

Dejando de lado las variedades comerciales más conocidas como: Granny Smith, Royal Gala, Red Delicious, entre otras, que ya llevan bastantes años de producción en Chile, existen manzanas ancestrales, cuyo patrimonio y conservación se ha ido perdiendo desde que llegaron en la época de los colonos españoles, entre el período comprendido entre los años 1700 a 1850. Es así como la antigua variedad de manzana Limona es introducida en la zona sur, adaptándose muy bien a las condiciones de clima templado-húmedo, y adquiriendo una marcada preferencia de los consumidores de fruta y de la agroindustria (jugos, chicha y sidra).

En este contexto la UACh, entre otras acciones, con financiamientos gubernamentales, ha desarrollado proyectos con el apoyo de la Asociación Gremial de Productores y Procesadores de Manzanas de esta región, permitiendo la creación de un Jardín de Ecotipos en la Estación Experimental Agropecuaria Austral (EEAA) de la UACh y un Catálogo de Ecotipos de Manzanas Ancestrales de la zona.

Actualmente, la manzana Limona se sigue preservando a través de quintas familiares y alrededor de 5 huertos comerciales en la Región de Los Ríos, con una superficie plantada que va desde 1,5 a 8 hectáreas aproximadamente y que producen manzana para elaborar sidra.

Los frutos de este ecotipo se han descrito de calibre pequeño y de forma redonda, con piel de color amarillo limón cuando alcanza la madurez fisiológica, destacándose una puntuación lenticelar de color verde a pardo, homogéneamente distribuida sobre la fruta. La piel es firme, gruesa y casposa al tacto, con un discreto “russet” en la cavidad pedicelar. La pulpa es blanca, de textura firme, crujiente, sub-ácida a ácida y aromática. Su madurez se produce entre febrero y marzo (120 a 150 días después de plena flor) (Medel, 1992).

Consumo en Fresco

Hoy en día, la producción de la manzana Limona para consumo en fresco no tiene un mercado formal desarrollado, sólo existe una comercialización incipiente y a nivel local en ferias libres principalmente. Debido a que el principal mercado es la producción de sidra, es muy relevante el manejo cuidadoso de las características de calidad frutal, especialmente, azúcar y acidez que le imprimen un sello característico de sabor particular a su sidra. Sin embargo, no existe información acerca de los manejos agronómicos y la determinación del momento óptimo de cosecha para la manzana Limona para el consumo fresco.

Con el objetivo de estudiar el potencial de esta variedad para el mercado en fresco, se investigó la curva de desarrollo y maduración de frutos de la manzana Limona del huerto Lemon Apple, localidad de Tralcao, comuna de Mariquina, en la Región de Los Ríos. El equipo de trabajo agradece el apoyo del Ing. Agrónomo Carlos Martínez de la mencionada empresa.

La idea fue determinar el momento óptimo de cosecha de las manzanas para consumo fresco se llevaron a cabo cosechas periódicas colectando datos de maduración y calidad frutal cada semana. Posteriormente, la fruta fue trasladada a la Facultad de Ciencias Agrarias y Alimentarias de la Universidad Austral de Chile para, posterior, efectuar análisis de laboratorio, donde se realizaron mediciones de firmeza, test de lugol (almidón), sólidos solubles, y desórdenes fisiológicos entre otros parámetros. El desarrollo de la fruta en el árbol se evaluó desde el 11 de febrero hasta el 01 de abril de 2021 (50 días).

El test de almidón es uno de los parámetros que determina la madurez fisiológica de la manzana, por lo tanto, permite predecir la calidad de esa fruta a cosecha y su potencial de almacenaje. Un valor de 4-5 como se muestra en el gráfico, es un valor apropiado para consumo en fresco.

Fig 1. Curva de degradación de almidón en manzana Limona durante desarrollo y maduración de la temporada 2021. La escala comercial de degradación de almidón del cv. Golden Delicious fue usada como referencia. Fuente elaboración propia.

Desórdenes fisiológicos en manzana Limona

La mayoría de los desórdenes se manifiestan en postcosecha, pero se inducen durante el crecimiento y desarrollo de la manzana en el árbol. Dentro de las alteraciones más comunes que afectan la calidad de la manzana están: el escaldado superficial, pardeamiento interno, bitter pit o depresión amarga y corazón acuoso. Siendo este último, un trastorno fisiológico que se produce durante la precosecha en el árbol, manifestándose al interior de la manzana y se caracteriza por la presencia de líquido rico en sorbitol, que es el principal carbohidrato de transporte de la manzana.

De acuerdo a nuestras observaciones preliminares, corazón acuoso se presentó partir del octavo día del inicio del ensayo (18 de febrero) hasta el 01 de abril. La incidencia ha variado desde un 5 a un 25%.

Fig 2. Desorden fisiológico corazón acuoso a partir del día 18-02 en manzana Limona durante desarrollo y maduración de la temporada 2021. Fuente elaboración propia.

Algunas conclusiones

En relación a la investigación desarrollada se concluyó que la manzana Limona para consumo fresco posee buenas cualidades de firmeza y azúcar, parámetros de calidad que se mantuvieron bastante estables a través de la curva de maduración, por lo que, no representan un problema en caso de retrasarse la cosecha.

Sin embargo, el contenido de almidón cambió abruptamente a partir del 11 de marzo comenzando una degradación más prominente de este parámetro, por lo que no se recomendaría retrasar la cosecha dado que fruta con mayor grado de madurez tiene un menor potencial de almacenaje. De acuerdo con nuestros resultados preliminares, es posible coincidir con la cosecha de sidra (12-13 °Brix) para una cosecha de consumo en fresco.

 

Franco Casanova efectuando análisis de laborororios en la UACh